jueves, 30 de octubre de 2014

¿Por qué tener una aupair en casa?


Siempre ando hablando de la aventura como aupair, pero la verdad es que también tiene que ser una gran aventura tomar la decisión de tener una aupair en tu casa.

Agradezco tener confianza con mi host family para poder haber hablado de esto con ellos y, como os podéis imaginar, la decisión no es nada fácil. En el caso de mi host family, lo hicieron porque una familia muy cercana a ellos ya había tenido dos aupairs españolas y la última les había parecido muy simpática y habían tenido muy buena experiencia con ella. Además, como bien sabéis, tienen cuatro peques y muchas veces un poquito de ayuda no está nada mal. También hay que añadir que, según me dijeron, las chicas de Irlanda son mucho más frías que las españolas (por lo general, que en ambos sitios hay de todo) y no les hace mucha gracia trabajar cuidando niños ni pasar el día haciendo actividades y cosas con ellos.

El caso es que se pararon a pensar en los beneficios que tendrían si cogían a una aupair:
  • Los niños pueden empezar a aprender un idioma jugando y con mucha facilidad (de hecho, mi chiquitina, con 2 añitos recién cumplidos, ya dice los número del uno al quince en español, las partes del cuerpo, días de la semana...)
  • Sin darse cuenta, también aprenden una nueva cultura. Es cierto que cuando tú te planteas irte a otro país eres la que se adapta a ellos, pero sin darte cuenta, también les inculcas ciertas costumbres o cosas (por mucho que se intente, todo el mundo tenemos unas raíces).
  • Por lo general las aupair somos chicas jóvenes relacionadas en algún aspecto con el ámbito infantil, por lo que se aseguran de que la persona que va a cuidar a sus hijos va a tener cierta experiencia con niños o, al menos, conocimientos de este campo.
  • Cuando te vas de aupair buscas disfrutar de la experiencia al máximo y aprender inglés, por lo que saben que vas a pasar mucho tiempo con ellos, aunque no estés trabajando. Sobre este punto quiero hacer una puntualización, nunca mejor dicho, ;). A lo que me refiero es que al fin y al cabo, vives en la misma casa en la que trabajas y es cierto que hay días que te apetece estar en la habitación viendo una serie o, en mi caso, debo dedicar tiempo al TFG. Sin embargo, también hay días en los que me apetece estar con ellos viendo la televisión, una peli o haciendo un puzzle (aunque ya no esté trabajando como tal) y es que pasas tanto tiempo con ellos que acaban siendo TUS NIÑ@S.
  • Esto último también es un punto importante: cuando eliges a una persona para que cuide a tus hij@s pasan ciertas horas haciendo su trabajo y luego se van, tal cual. Cuando eres aupair (evidentemente depende de la familia y del aupair) te conviertes en un miembro más de ésta, tanto cuando os vais a pasar un día de excursión como si hay un incidente.
  • A las aupairs, normalmente, nos gusta hacer todas las actividades que podamos con los niñ@s. Es cierto que cuando hay cole lo tenemos algo más complicado con los deberes, actividades extraescolares y demás, pero te emocionará hacer manualidades, recetas... con ellos. Y te encantará preparar sorpresas para sus cumpleaños.
Y aunque haya muchos beneficios de tener una aupair, no debemos olvidar lo importante que es esta decisión, motivo por el que seguramente muchas host families tarden en responder a nuestros correos. Nosotras no nos damos cuenta porque esperamos ansiosas una respuesta, pero tened en cuenta que ellos tienen que pensar que la persona que elijan va a pasar el día en su casa (no dejas de ser una extraña de otro país) y no saben realmente cómo eres. Además, vas a pasar el día entero con sus niños, que es lo que más les importa en el mundo. ¿Qué significa esto? Pues que por muchas recomendaciones que les mandemos, les añadamos a nuestros perfiles sociales personales... No te conocen, no saben si todo lo que ven es verdad, aunque hablen contigo no conocen tu personalidad... Y, sinceramente, si yo me pongo en su situación, creo que me costaría mucho tomar la decisión y decantarme por alguien.

Es más, ¿os cuento un secreto? Soy la primera aupair de mi familia y no sé qué pasará el próximo año, pero en caso de que viniera una aupair nueva... ¡No os imagináis lo difícil que será para mí! Que va a ser una persona completamente diferente que pase el día entero con MIS NIÑ@S, ;)

lunes, 27 de octubre de 2014

Vuelos Madrid Dublín

Imagen tomada de stencilbarcelona.com
Si vais a iros de aupair por la zona de Cork y alrededores y salís de Madrid, no os molestéis en buscar vuelos económicos al aeropuerto de esta ciudad, porque es imposible.

Para viajar de Madrid a Irlanda (Dublín) las compañías aéreas más baratas y con mejores servicios (no hacen escalas y hay varios vuelos al día) son Ryanair y AerLingus. ¿Cuál es mejor? Para gustos los colores.

Es cierto que hace unos años Ryanair era demasiado exigente con todas sus políticas de maletas, pesos y demás, pero ahora mismo ha mejorado bastante. También cabe señalar que como esta aerolínea es irlandesa se nota bastante la diferencia a cuando viajas a otros países: los aviones suelen ser algo mejores, todo está mejor organizado... Cuando fui por primera vez a Dublín (para vivir mi experiencia como aupair) la verdad es que quedé muy contenta con el servicio. Es cierto que hacen lo de la lotería y demás, pero no podemos hacer nada por esto (ahora cada vez menos y montan menos "numerito"). Además, después de unos cuantos viajes Dublín-Madrid con ellos, podéis usar el truco de hacer el check in con menos de 24 horas de antelación de que salga vuestro vuelo y conseguir de esta manera ser "preferentes" a la hora de entrar en el avión (se agradece, ¿eh?).

AerLingus la conocí cuando busqué mis vuelos a Irlanda y, finalmente, cuando más la estoy y voy a usar es para venir de Dublín a Madrid, ya que los horarios son algo mejores que los de Ryanair y, dependiendo del día, puede ser más económico. Puede que a primera vista creas que hay una gran diferencia entre esta aerolínea y la anterior, pero no es así. De hecho, ahora mismo, mi experiencia es mucho mejor con Ryanair que con ésta. Es cierto que el personal parece mejor cualificado (pero no hablan nada de español, algo que para mí no es un problema, pero para otras personas sí y deberían tenerlo en cuenta a la hora de elegir el personal) y el avión no tiene mucha diferencia con Ryanair (los colores, básicamente). Durante el vuelo no molestan con propaganda y demás, pero suelen ir con bastante más retraso que la compañía anterior. Además, en cuanto al pasajero le interesa, suelen medir y pesar maleta por maleta, algo que hace que el viaje se retrase y que, en caso de llevar algún gramo de más, tu maleta se vaya a la bodega.

Iberia. Sí, aunque os parezca raro, con eso de sus servicios de Iberia Express podéis encontrar precios sorprendentes y con buenos horarios. La parte buena de esta compañía es que además incluye la facturación de maleta por una diferencia mínima en el precio (no como sucede en las "low cost").

Ryanair también manda maletas a la bodega y lo hace por orden de llegada, algo que a algunas personas puede que no les parezca justo cuando les toca, pero creo que la política de AerLingus es mucho más molesta ya que después de poner tarde la puerta de embarque, si además se entretienen con estas cosas pasa lo que pasa: En mi caso llegamos media hora tarde al destino.

En cuanto a cancelaciones, al menos con AerLingus recuperas una parte de las tasas, cosa que con Ryanair pierdes todo...

¿Precios? Depende del tiempo de antelación con el que lo cojas, día de la semana y hora, pero normalmente, para hacer el trayecto Madrid-Dublín suele ser mejor Ryanair y para Dublín-Madrid AerLingus, pero como digo... Todo depende.

Dicho esto, si queréis buscar vuelos baratos y haceros una escapadita por Irlanda, ya sabéis que aerolíneas usar, ;)

domingo, 26 de octubre de 2014

De turista por Chinchón


Que sí... Que sé que llevo unos días teniendo esto un poco abandonado... El caso es que por ciertas circunstancias (¡nada grave!) me he vuelto a España unos días y ya que estaba por aquí... No me iba a pasar todo el día pegada al ordenador, ;)

Bien es sabido por todos aquellos que me conocen que no me gusta mucho mi pueblo. Me explico: Chinchón es un pueblo muy bonito para visitar y pasar el día, pero no para vivir ya que no cubre las necesidades básicas que cualquier joven puede buscar/necesitar.

Así que como ahora mismo no estoy viviendo aquí, hoy me he tomado la cosa filosóficamente: Se ha venido mi chico a pasar el día conmigo y hemos decidido pasar el día como dos turistas.

Punto número uno: Como buenos turistas, hemos elegido el mejor día para pasear por Chinchón: un día soleado con el típico calorcito de otoño.

Nuestra primera parada ha sido el Castillo (no, no se había movido de sitio desde que me fui) y nos hemos estado tomando alguna que otra foto. Y cómo no, la típica en la que se ve la iglesia, teatro y torre.


Después de esto nos hemos bajado a la Plaza Mayor. Sabiendo el buen tiempo que hacía y que iba a haber bastante gente, decidimos reservar una mesita en el balcón de uno de los restaurantes que la rodean. Una opción más que recomendable: La Casa del Pregonero.

Llevando dos meses fuera de España apetece comer cosas de casa, así que nos decantamos por tomar dos exquisitos platos: Croquetas de bogavante y arroz caldoso de carabinero y jamón ibérico. ¡Para chuparse los dedos! (Solamente hace falta que veáis las fotos)


Ambos platos han estado acompañados en todo momento de las magníficas vistas de la Plaza y de la amabilidad y atención del personal del restaurante. Queremos felicitar a Rubén y a todo su equipo por su trabajo y por hacernos sentir como en casa.

 


Y cómo no, con lo golosa que soy... ¡No podía faltar un buen postre! La tarta de queso me encanta, así que nos hemos decantado por ésta y la verdad es que nos ha sorprendido lo buena que estaba. Hagamos honor al dicho de "una imagen vale más que mil palabras", porque nosotros nos hemos quedado sin ellas, :)


Creeréis que ya hemos terminado, pero no. Después del postre ha venido (por parte de la casa) el repostre: una selección de dulces de Chinchón que, desde luego, no tenían desperdicio alguno.


El único problema que hemos tenido es que, al no ser turistas reales, mi casa está en la parte alta del pueblo y subir las cuestas de Chinchón ha sido un verdadero problema después de tan copiosa comida. ¡Por cierto! El precio total de la comida ha sido mucho menos de lo que os podáis imaginar. Desde luego, repetiremos :)

Si no sois de Chinchón pero habéis oído hablar de él, acercaos, conocerlo, pasear sus calles y visitarlo, porque estoy segura de que os encantará.

Y ya sabéis... ¡a turistear! ;)


sábado, 18 de octubre de 2014

Cómo hacer castillo de chuches


Esta semana ha sido la de los cumpleaños y fiestas. Si el miércoles celebrábamos el de la pequeña, mañana vamos a por el de la mediana.

Y como para cualquier cumpleaños surge la duda de... "¿Qué le regalo?" Sí, podría haberle comprado cualquier cosa y ya está, pero en esta ocasión me apetecía hacerle algo que le sorprendiera, le gustara y fuera hecho por mí, algo que se le quede en la memoria y dentro de unos años se acuerde de que Cris, la aupair que tuvo le hizo un castillo de princesas con chuches para su cumple.

Es cierto que no es algo fácil, rápido ni tampoco muy barato. En España sí se pueden encontrar gominolas y chucherías por buen precio, pero en Irlanda esto es algo que por ejemplo suele ser más caro. Eso sí, cuando ves el resultado, te quedas súper contenta y, en mi caso, darle la sorpresa casi me hace más ilusión que a ella podrá hacerle el regalo.

Si queréis hacerlo, tenéis que tener paciencia y no escatimar en chucherías. Cuantas más le pongáis, más colorido será y más bonito quedará. En este caso yo he hecho un castillo, pero podéis hacer una tarta normal o cualquier otra forma. Solamente tenéis que dejar volar vuestra imaginación y ser algo manitas, claro está, jeje.

¿Qué necesitáis para hacer el castillo de princesas? (16 raciones aproximadamente)
  • Corcho blanco
  • Palos de pincho moruno
  • Palos de plástico o palillos (si estáis en España, los de plástico los podéis encontrar fácilmente en el Mercadona)
  • Ocho rollos vacíos de papel higiénico
  • Cuatro gomas finitas (las que se usan para hacer las pulseras de ahora)
  • Celo
  • Papel albal
  • Chucherías varias: nubes (yo he usado 4 bolsas para este castillo), gominolas, lenguas, regalices, etc.
  • Cucurucho (yo he usado unos que venden en el Lidl y están rellenos de nata y tienen la superficie cubierta de chocolate.
¿Cómo hacerlo?

Normalmente os suelo explicar paso a paso con palabras, pero en este caso creo que lo más sencillo es que lo vayáis viendo vosotros mismos a través de imágenes:


Lo primero que tenéis que hacer es tener clara la estructura de vuestro castillo o de la forma que vayáis a hacer. Como podéis ver, he pegado de dos en dos los rollos de papel para crear las cuatro torres y mi estructura está hecha a partir de un cuadrado como base, las dos torres y cuatro paredes (dos más altas). Una vez tenemos clara la estructura y vamos a ponernos manos a la obra con el castillo, cubrir cada una de las partes con papel albal. Hacedlo en el momento de poneros a construirlo, ya que se cubre para proteger las gominolas de la suciedad que pueda tener el corcho y del polvo que éste pueda tener.


No os asustéis, que como habéis visto al principio, el resultado (aunque ahora parezca que no) es genial; ;)

Una vez tengáis todo cubierto, es importante que fijéis adecuadamente la estructura. Podéis hacerlo con celo o con los propios palos. No abuséis del celo ya que luego será más complicado pinchar sobre él los palillos. Las torres no las he sujetado con nada ya que las propias chucherias pinchadas en el palo de pincho moruno sirven de soporte.

Acabados estos pasos... Lo único que tenéis que hacer es ¡empezar a poner chuches! ¿Cómo? Como queráis: visualizarlo en vuestra cabeza y haced todos los cambios que creáis convenientes. No os preocupéis si se os queda un agujero en el soporte, ya que luego todo irá cubierto y no se verá.


Por si os sirve de ayuda, para cubrir las torres yo he usado 7 brochetas de nubes. Una vez las pinchéis, a mí al menos no se me quedaban unidas al rollo, así que he usado una gomita de las que usan ahora las niñas para hacer pulseras para unir todas las brochetas a la "torre" y que ésta quedara recta y firme.

Tras hacer las cuatro torres, he comenzado a poner chucherías por todas partes y... ¡éste es el resultado!



Es un regalo muy dulce y original para diferentes situaciones: cumpleaños, comuniones, una fecha especial... ¿Os animáis a hacer vuestra "tarta" de chuches?


P.D. Si no la vais a dar en el momento, cuando la acabéis cubridla con un plástico para que las gominolas no se queden resecas ni duras, ;)

jueves, 16 de octubre de 2014

Aupair en pueblo o en ciudad


Seguramente que cuando tomáis la decisión de iros de aupair y tenéis decidido el destino, os toca debatir con la idea de iros a un pueblo o a una ciudad. Como todo, cada una de las cosas tiene sus ventajas y desventajas.

Evidentemente, si te vas a una ciudad te puedes olvidar de ahorrar. No es lo mismo irse a Irlanda o a Polonia, pero si estás en una ciudad seguramente tengas más gastos: hay más tiendas, tienes que pagar transporte para moverte de un sitio a otro, el ocio es diferente... Eso sí, todo lo que tiene de negativo en este aspecto lo tiene de positivo. En una ciudad nunca tendrás tiempo para aburrirte: exposiciones, miles de tiendas, cine... A la hora de hacer amigos tendrás que recurrir a asistir a clases o algo por el estilo para pertenecer a un grupo y comenzar a conocer gente...

En mi caso, y teniendo en cuenta lo poco que me gusta vivir en mi pueblo de España, decidí irme a un pueblo de Irlanda, ¿por qué? A ver, tengo claro que si decidiera vivir fuera durante más tiempo no me quedaría aquí, pero para pasar una temporada no está nada mal. Desde el primer momento la gente te conocía y al verte por la calle te saludaba, por lo que el conocer a gente y hacer amigos no fue ningún problema cuando llegué. Es cierto que ahora mismo la mayoría de las veces estamos con gente española, pero poco a poco vamos conociendo a más gente e intentando hablar menos en español. En cuanto al dinero... Es cierto que sales, que vas a un sitio, que te tomas un café... Pero no es lo mismo que si estuviéramos en una ciudad ya que no tenemos tantas tentaciones (salvo el chocolate, claro, jajajaja). Además, vivir en un pueblo de Irlanda tiene mucho encanto, ya que recuerda mucho a películas, son muy bonitos y las zonas son muy verdes, por lo que los días de sol se agradece mucho poderte ir tranquilamente con una bolsa de patatas y algo de beber a tirarte en la hierba. Eso sí, vivir en un pueblo, al igual que en España, tiene la desventaja de que todo el mundo te conoce y puede hablar de ti tanto bien como mal (espero que de mí solo lo estén haciendo bien, jajajaja). También tengo que reconocer que el pueblo en el que estoy hay bastantes cosillas y además está cerca tanto de Cork como de Dublín, por lo que el día que nos apetece ir a una ciudad, podemos hacerlo sin problema (el único, el dinero, que el transporte en Irlanda, por lo general, es demasiado caro).

¿Y vosotros? ¿Lo tenéis ya claro? ¿Os vais a un pueblo o a una ciudad?

miércoles, 15 de octubre de 2014

Cómo hacer el brownie perfecto


Creo que no hace falta que os diga que soy una golosa y que me encanta cocinar y hacer tartas, pasteles y demás. Pero claro, por si fuera poco, ahora somos dos: No nos podemos olvidar de la "testadora oficial de chocolates de Irlanda", cuyo nombre a partir de ahora será "Chocolate girl", ;)

Total, que hoy es el cumple de mi pequeña y queríamos hacer algo especial, así que la "Chocolate girl" ha preparado todos los ingredientes para que pudiéramos hacer el brownie perfecto.

La verdad es que yo ya he probado a hacer en otras ocasiones el típico brownie de microondas, pero nunca me ha gustado cómo queda. El de esta ocasión es el mejor que he llegado a hacer y se tarda muy poquito. ¿Queréis ver cómo lo hemos hecho? ¡Manos a la masa!

¿Qué necesitáis? (16 raciones aproximadamente)
  • 50 g. de chocolate negro
  • 100 g. de mantequilla
  • 200 g. azúcar (puede ser brown o white)
  • 2 huevos
  • 1/2 cucharada de vainilla (si la cuchara es de té, una entera)
  • 75 g. de harina
  • 1/2 cucharada de levadura
  • 110 g. de nueces troceadas
¿Cómo prepararlo?

Lo primero que tendréis que hacer será encender el horno para que mientras que preparáis la masa se vaya calentando. Encendedlo arriba y abajo a temperatura máxima. La temperatura de coción será 180ºC.

Con lo primero que trabajaréis será con la mantequilla. Intentad sacarla un poquito antes del frigorífico par que no esté demasiado dura. Si se os olvida, siempre podéis recurrir al microondas, pero ¡cuidado! que se derrite demasiado rápido.

Mezclad en un recipiente la mantequilla con el azúcar y batir con las varillas hasta que se quede una especie de crema. Por otro lado, batid los huevos lentamente y una vez acabéis con ellos, añadidlos a la crema hecha con la mantequilla y el azúcar.

Cuando consigáis una mezcla cremosa y homogénea, añadid los 50 g. de chocolate derretido. Para derretirlo, podéis utilizar el microondas (en otro post os contaré la anécdota de hoy) o hacerlo a fuego lento. Para que no se os queme, siempre podéis ponerle un poquitín de leche.

Una vez mezclados los ingredientes anteriores, añadid la harina, la esencia de vainilla y las nueces y removed. Puede que se os haga algo pesado ya que no es una masa líquida, pero es necesario que la mezcla quede completamente homogénea y sin grumos. Si queréis, siempre podéis utilizar la batidora con varillas en vez de hacerlo manualmente, pero es más divertido si lo hacéis vosotros mismos. Por último, añadid la levadura y removed.


Cuando tengáis todos los ingredientes juntos os quedará una mezcla como ésta. Coged un molde (preferiblemente cuadrado o rectangular) y cubridlo de papel vegetal o de mantequilla para que le brownie no se quede pegado y verted la mezcla en él con ayuda de una espátula.

Antes de meter la mezcla en el horno, aseguraos de que éste tenga la temperatura indicada (180ºC) y dejadlo durante 30-35 minutos. Revisadlo de vez en cuando para que no se os queme y tampoco se os quede crudo.

Cuando lo saquéis del horno, la apariencia será la siguiente: la parte superior más hecha y el interior más jugoso.

Si lo habéis hecho en papel vegetal, colocadlo en una rejilla durante unos minutos para que se enfríe. Y si habéis usado mantequilla, esperad a que el molde esté frío para poder desmoldarlo.

Para servirlo, cortad el brownie en pequeños cuadraditos y podéis acompañarlo de chocolate derretido y nata. Nosotras hemos optado solamente por el chocolate y le hemos añadido un té.

¡Nuestras peques se han chupado los dedos!

domingo, 12 de octubre de 2014

Maestras del chocolate irlandés


Pues sí, la descripción perfecta para mi compi y para mí es el cerdito que hay de fondo en la foto. Y es que si el otro día escribía un post en el que decía cómo se puede ahorrar dinero siendo aupair, hoy os voy a decir cómo perderlo. He aquí la foto de los culpables:


Pues sí, lo que parecen dos inofensivas tabletas de chocolate... En Irlanda puede ser vuestra perdición. Si sois golosos y os gusta el chocolate, evitad a toda costa ir a supermercados y tiendas de alimentación, porque encontraréis muchísimas "ofertas" en mil tipos de chocolate diferentes y cuando queráis daros cuenta os habréis gastado una cantidad notable de dinero en esto. Y si probáis las gominolas de The Natural, ¡ni os cuento! (¡Se me hace la boca agua de solo pensar en ellas!).

Total, que como todos los sábados la "testadora oficial de chocolates de Irlanda" y yo decidimos ser responsables e irnos a pasar el día a la biblioteca a hacer nuestros TFGs. Y, como siempre, en la hora de descanso nos fuimos a tomar un té y a dar una vuelta. En esta vuelta cometimos uno de los mayores errores del día (o no): entrar al SuperValu para ser tentadas por nuestro amigo Cadbury: "Seconds on the lips inches on the hips". Para no sentirnos del todo mal, decidimos compartirlo, pero el resultado era el mismo, porque si sois dos personas y os coméis la mitad de dos chocolatinas cada una... Os acabaréis comiendo una chocolatina entera como resultado final, jajaja.

En fin, que estos dos tipos de chocolate aún no los habíamos probado y como había una "oferta" decidimos que para quitarnos un poco de estrés podíamos "catarlos" y hacer nuestra crítica.

El primero, el Dairy Milk Turkish, no sabíamos muy bien de qué iba a ser. Yo me llegué a imaginar que estaría relleno de delicias turcas, por ejemplo. El caso es que cuando lo probamos vimos que lo que tenía en realidad era una especie de gelatina de frambuesa en su interior. Estas fueron nuestras impresiones:

  • "Es como un poco frambuesa artificial"
  • "Una sensación diferente en la boca"
  • " Es como aterciopelado"
En cuanto al Dairy Milk Tiffin, nos dio una buena sensación desde antes de abrir el paquete. Tenía muy buena pinta y leímos los ingredientes y pensamos que tendría que estar muy bueno. ¿Cuáles fueron nuestras primeras palabras?

  • "Éste está muy rico, ¿eh?"
  • "Al principio hay que chuparlo, pero cuando ya notas la textura de la pasa y la galleta, tienes que morderlo. Entonces notas el crunch de la galleta y el smooth de la pasa"
Sabias las palabras de la "testadora oficial de chocolates de Irlanda", ¿verdad? 

¿Queréis saber cuál fue el resultado final? Pese a nuestras palabras decidimos que ninguno de los dos había sido de los mejores. Por ahora yo me quedo con el de ChipsAhoy y ella con el de Marvellous Creations Banana Caramel Crisp, aunque ninguna de las dos hemos probado aún el favorito de la otra.

Así que... Lamentándolo mucho... Habrá que seguir aprovechando esas "ofertas" y seguir probando, ;)

¿Y vosotros? ¿Habéis probado los chocolates Cadbury? ¿Cuál es vuestro preferido?

jueves, 9 de octubre de 2014

Crazy weather


Pues sí, no hay mejores palabras que describan el tiempo el Irlanda: "crazy weather". Aún recuerdo cuando llegué el 19 de agosto recién acabadas mis vacaciones en las playas de Valencia... ¡Qué frío tenía! Iba vestida con ropa de invierno y aquí todos iban aún con pantalones cortos y camisetas de hombreras... Y yo, ¡hasta con abrigo! (Hubo hasta un día que tuvimos que encender la calefacción).

Cierto es que a las dos semanas estaba más o menos acostumbrada y que, aunque no haya llegado a ponerme en pantalones cortos, conseguí estar en camisera corta.

Eso sí, creo que ya el tiempo no nos va a dar más tregua. De hecho, llevamos toda la semana teniendo que poner la calefacción y durmiendo con bolsa de agua caliente en la cama. Por supuestísimo que ya me he cambiado al pijama de invierno total.

En cuanto al día... Lo mismo está lloviendo, que hace sol, que llueve y hace un viento que tumba los árboles, que está lloviendo a mares y a la vez hay sol. Así que cuando sales a la calle, no sabes si ser una cebolla, si ir con ropa más o menos normal y chubasquero o si ir con una simple sudadera.

¿Qué quiere decir esto? Que si estás pensando venir de vacaciones a Irlanda o pasar una temporada por aquí, no te puedes olvidar traerte unas botas de agua, un raincoat y un buen jersey o sudadera.

Es ahora cuando se agradece esa costumbre de allá donde vas que te ofrezcan un té o un café calentito. No sé lo que pensarán ellos, pero a nosotras nos salva más de una vez la mañana... Jajajaja, ;)

miércoles, 8 de octubre de 2014

Sweet moments


Y no, no estoy hablando de esos días en los que los peques te despiertan a media noche porque están llorando o a las 08.00 de un sábado gritando porque para ellos es de día.

Me refiero a esos días en los que estás libre y no ves a tus niños hasta por la noche o, incluso, el día siguiente y nada más verte se abrazan a ti. O estar haciendo cosas y que les dé el arrebato y se acerquen a ti simplemente para darte un abrazo o un beso.

Es cierto que el trabajo de aupair hay veces que es duro: pasas muchas horas con los peques y lo mismo que lo pasas genial con ellos jugando y haciendo cosas, hay otros días que pueden estar más revoltosos.

Hay veces que la hostfamily te pregunta si echas de menos tu casa. Y, evidentemente, hay días que te gustaría estar con tu gente, pero la suerte que tenemos las personas que estamos de aupairs es que no nos podemos quejar de mimos, abrazos y muestras de agradecimiento. Puede que tu hostfamily te diga que estás haciendo bien tu trabajo o no, pero tus peques te lo dirán día a día con sus muestras de cariño: esperándote en la puerta del baño a que salgas, hablando bajito porque "Pris sleeping". Además, si tenéis niños pequeños, seguro que os encanta que se tumben con vosotros y se queden dormiditos en tus brazos,,, Es un momento taaaan tieeernoooo...

¿Cuál es vuestro "sweet moment"?

Manualidades de otoño


Llega el otoño y con él las lluvias, el viento y el mal tiempo. ¡Pero que nada os pare!

Ayer por la tarde estábamos en casa y salimos un rato a la calle a jugar, pero hacía frío. Entonces se nos ocurrió coger unas hojas caídas de árboles y hacer nuestro propio árbol en casa. ¡Es muy fácil y divertido!

Lo único que necesitáis es coger una hoja grande de papel y dibujar un árbol. Una vez hecho, cogéis el pegamento y dejáis que los niños dejen volar su imaginación y coloquen las hojas donde más les guste. ¡Se lo pasan genial y quedan árboles tan bonitos como éste! ¿Qué os parece?

domingo, 5 de octubre de 2014

Cómo ahorrar siendo aupair


Seguro que nada más leer el título muchas/os habéis pensado "IMPOSIBLE". Pero no, no lo es. Simplemente se necesita un poquito de organización.

La mayoría de los sueldos como aupair están entre los 80-100€/semana. Si estáis en Londres, por ejemplo, esto serán libras. Es cierto que lo que os voy a contar ahora depende mucho del sitio en el que viváis ya que, aunque nos quejemos mucho de España y yo, concretamente, del transporte público de Madrid, viajar en el extranjero es bastante más caro.

Vivas donde vivas, lo único que tienes que hacer es, a principio de semana, establecerte cuál será tu gasto semanal. Es decir, si vas al gimnasio, tienes que pagar bus, tienes pensado hacer una excursión... Piensa en cuánto dinero necesitas y luego establécete un margen para gastos: tomarte un café, salir a tomar una cerveza... Y el resto del dinero, guárdalo. Pero guárdalo de verdad. No sirve eso de... Bueno, esta semana voy a coger eso de más porque... Se me ha acabado el dinero porque me he tomado tres cervezas en vez de dos... A ver, evidentemente, hay semanas que los planes cambian y puedes gastarte algo más o que tengas que comprar regalos para ocasiones especiales (cumpleaños, Navidades...) pero debes tener claro que tú eres el responsable de tus gastos y cuáles son tus prioridades y motivos por los que estás de aupair.

En mi caso, por ejemplo, estoy aquí porque quiero mejorar mi inglés y porque la situación en España para la gente del ámbito de la comunicación está muy complicada, por lo que decidí que vivir una aventura en el extranjero sería algo muy beneficioso para mí y para mi CV. ¿Quiero ahorrar? Por supuesto que sí, pero si ahorro es para luego poder hacer viajes por Irlanda y disfrutar de la experiencia.

¡Por cierto! Otro truco para ahorrar es ir metiendo monedas en un bote de vez en cuando. De esta manera, cuando quieras darte cuenta, ¡puedes tener hasta 20€! Que sí, que sólo son 20, pero... ¿Y la alegría que dan?

¿Tenéis algún truco para ahorrar?

miércoles, 1 de octubre de 2014

Consejos de aupair a aupair


Si alguien lee el blog de una aupair suele encontrarse los dos extremos: aquélla que tiene la mejor familia del mundo y la que tiene la peor. En mi caso creo que no tengo la mejor, pero sí que es muy buena, a pesar de que de vez en cuando pueda molestarme algo (recordemos que ser aupair es un TRABAJO como cualquier otro).

He aquí por donde voy a empezar hoy, por recordar a todo el mundo que ser aupair no deja de ser un trabajo. Es como si fueras profe. Sí, te pasas el día jugando con los peques, haciendo con ellos pasteles y llevándolos de paseo. Pero también educándolos, enseñándolos a ser buenas personas, consolando sus penas y aguantándolos en sus malos días (que todos los tenemos). Y es que estoy un poco cansada de aquello de.... "¡Qué bien te lo tienes que estar pasando!". Pues sí, estoy disfrutando de mi experiencia y me lo paso fenomenal porque me encantan los niños y hacer actividades con ellos, pero después de estar más de 9 horas con ellos... Acabas cansado. ¿Qué hay de esos días que están hora y media llorando porque sí? ¿O las rabietas que cogen porque no quieren hacer los deberes? O ser pequeños e imitar todo lo que ven a sus hermanos, sea bueno o malo. Para todo eso también estamos las aupairs.

Ni que decir cabe, que necesitamos nuestras horas de desconexión y descanso. Para aquellas aupairs que estáis empezando, tened esto en cuenta. Entiendo que queráis gustar a la familia (a todas nos ha pasado) y que al principio queráis pasar más tiempo con los niños para que se acostumbren a vosotros/as, pero recordad que necesitáis descansar, porque si no, podéis saturaros en un momento determinado. Cuando tengáis vuestro día libre, disfrutadlo: salid a la calle, haced excursiones, tomad algo con amigos o leyendo un buen libro, pero dedicad ese tiempo a vosotros/as. Cuando llevéis dos o tres semanas con vuestra host family, lo entenderéis.

Yo con mi familia estoy súper a gusto y contenta. Evidentemente, puede que haya cosas que a ellos les haya molestado de mí como a mí de ellos, pero es lo que tiene la convivencia. ¿No creéis?

Otra cosa que tenéis que tener en cuenta es que aunque seáis flexibles en algunos aspectos, si hubiera algo que os molestara considerablemente o algo que en un momento os dijeron que iban a hacer o ibais a tener y no es así, sentaos con ellos en la mesa y habladlo tranquilamente. ¡No os preocupéis! Ellos también son personas y entienden que os pueda costar explicaros, pero seguro que juntos llegáis a una solución. Y os aseguro que es mucho mejor que estar pensando durante todo el día en aquello que os molesta. Por suerte, yo no he tenido ninguna situación así (¡toco madera para que no ocurra!) pero sí lo he visto desde fuera con otra aupair y es lo mejor.

Recordad siempre que, además de para jugar, estáis ahí para enseñar a los niños y para educarles. Es cierto que es muy duro regañarles y verles llorar si son pequeños o castigarles con algo si son algo más mayores, pero eso no quiere decir que les queráis menos, todo lo contrario. De hecho, si son algo más mayores, cuando habléis con ellos éste puede ser uno de los argumentos: "Si hago esto es porque te quiero, porque es lo mejor para ti, porque de esta manera...bla, bla, bla". Y si son más pequeños, tanto ellos como vosotros os sentiréis mejor si al reconciliaros acabáis con un beso y un abrazo.

De esta manera, al final del día siempre podréis decir... ¡ESTOY ORGULLOSA DE SER AUPAIR!